Julio y principios de agosto supusieron todo un reto para el equipo y para el proyecto, ya que recuperar un ritmo de trabajo igualitario entre todos a la vuelta de las vacaciones nos costó más de lo previsto, además, teníamos una presión extra, que en esos momentos nos encontrábamos sin el visto bueno qué necesitamos para poder participar en la Giant Jamboree, la gala final de la competición iGEM. La prueba de fuego para ver si el proyecto reunía todas las condiciones se haría en agosto, en el Meetup Iberoamericano